La música que elegimos escuchar y disfrutar a menudo se convierte en parte de nuestra identidad
¿Qué oculta la música sobre nuestra mente?-. La música tiene una capacidad asombrosa para evocar y alterar nuestras emociones. Una melodía alegre puede levantar el ánimo, mientras que una triste puede generar melancolía.
Esto demuestra la intrincada conexión entre las áreas del cerebro que procesan el sonido y las que gestionan las emociones
Estas ondas pueden provocarnos multitud de sensaciones, son capaces de alterar estados de ánimos, esto sucede porque la música tiene la capacidad de liberar diferentes químicos cerebrales.
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En el cine, los directores suelen usar composiciones musicales que refuerzan las sensaciones que quieren que el espectador viva durante esa escena, por ejemplo el miedo.
El terror que podemos llegar a sufrir es debido a la reacción de la amígdala central, que es un grupo de neuronas situadas en el lóbulo temporal del cerebro que nos pone alerta arte ciertos estímulos.
Cuando escuchas la música que realmente te gusta, el cerebro se encarga de generar dopamina, el neurotransmisor responsable de nuestros subidones de felicidad.
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Nuestras preferencias musicales pueden reflejar nuestros valores, nuestras experiencias y los grupos sociales a los que pertenecemos.
EO//Redacción: Jesús Rodríguez