Las palabras tienen poder de decidir en tu vida, por eso eres lo que atraes a través de ellas, ten cuidado con lo que deseas para ti
No es cuestión de suerte: Eres lo que profetizas.- “Yo no tengo suerte para eso”, yo sé, que al igual que yo, esta frase la has escuchado muchas veces, e incluso también ha salido de tu boca, es utilizada para normalizar cualquier mala situación que nos sucede, tratando de convencernos de que no es nuestra culpa.
Normalmente, como seres humanos, observamos cosas y las anhelamos, lo que muchas veces otros tienen, como, por ejemplo: esposos, dinero, hijos, comodidades, y entonces, cuando vemos que carecemos de eso, viene de nuevo la negativa frase; “no es para mí, no tengo suerte para eso”.
Déjame decirte que, así como las causalidades, “la suerte”, si así deseas llamar esto, la puedes cambiar tú, a través de tu manera de empezar, desde ahora, a ver la vida,
Es allí cuando debes activar tu alarma y cerrarle la puerta a pensamientos y palabras negativas, que simplemente nos llevan a hundirnos más y más.
Quiero contarte, que una vez hasta escuché una frase: «compro un número e inventan uno nuevo para yo no ganar”, sin darnos cuenta, con nuestra propia boca, profetizamos lo que queremos y si a diario solamente hablamos negativamente hacia nosotros, eso es lo que tú vas a obtener. Sí, yo sé que tal vez no estás de acuerdo, quizás estás dudando o haciéndote en estos momentos un autoanálisis de tus palabras cotidianas, acá te explicó por qué hoy te estoy diciendo esto.
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La palabra profetizar anuncia o predice las cosas distantes y la causalidad se refiere a la relación entre causa y efecto, los resultados que obtienes van enmarcados a unas consecuencias de tus actos, que a veces suceden de manera involuntaria.
Por lo que, partiendo de estas definiciones, tenemos claro, que, si todos los días nos decimos a nosotros mismos que “no tenemos suerte”, “que eso no es para nosotros”, aunque lo queramos, eso es lo que vamos a tener; fracaso, pues no te estás dando cuenta que tú mismo estás atrayendo la negatividad y el conformismo.
La palabra tiene poder, también es muy común escuchar, recuérdala cada vez que algo negativo vayas a decir para ti o para cualquier otro, es importante que la cambies por “es para mí”, atrae con tu boca lo maravilloso que quieres en tu vida, nunca más digas frases: soy pobre, aunque estés pasando por una mala situación, siempre profetiza dinero, salud, felicidad, amor, y muchas cosas buenas para ti y las personas que te rodean.
Quiero finalizar con esta hermosa frase: «La suerte se echa en el regazo; más del Señor es la decisión de ella». Proverbios 16:33
No es cuestión de suerte, es lo que profetizas…. Es lo que Dios quiere que sea…
Periodista: Lcda.Carlenis Avendaño