¡Aprende! Prepara ñoquis de auyama.

¡Aprende! Prepara ñoquis de auyama. Redonda, alargada, grande, pequeña, anaranjada hasta verdosa, son sólo algunas de las características de la auyama y sus variedades. Cada región utiliza nombres distintos para describir cada tipo.

Pero, esta vez llamaremos calabaza a la más grande y anaranjada, que no falta en las películas de día de brujas, y auyama a la pequeña, de color verdoso que, en realidad, es la más popular en nuestro país.

En Venezuela se conocen dos variedades, la grande de forma esférica y la alargada conocida especialmente en la región Andina.

Cómo seleccionarla

Busque las más firmes, que se sientan pesadas para su tamaño. La piel debe ser lisa, que no tenga rastros de golpes. Una auyama sin picar puede durar varios meses fuera de la nevera. Si la corta solo dura tres o cuatros días.

Para cortar y pelarla fácilmente, sólo debe ablandar la piel, por lo tanto, hay que darle una precocción.

Aproveche toda la calabaza

Su valor nutricional no ha perdido vigencia porque toda la planta es útil. Tanto que hasta se puede hacer una sopa con la flor de la auyama o consumir como snack las semillas fritas.

Ñoquis de auyama

Ingredientes para la masa
  • 3 tazas de auyama cocida y triturada
  • 1 huevo
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • 2 tazas de harina de trigo
  • 1 cucharada de queso parmesano, rallado (opcional)
  • Sal al gusto
Para la salsa
  • 1000 g de tomate maduros
  • 125 g de cebolla
  • Sal
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • ½ racimo de albahaca
Preparación
  • 1 Mezclar bien todos los ingredientes para la masa. Hacer rollitos con ella y
  • cortarlos en trozos pequeños.
  • 2 Poner los ñoquis en una olla con 3 litros de agua hirviendo. Cuando suban los ñoquis a la superficie, sáquelos con una espumadera. Servir con salsa y el queso parmesano rallado.
  • 3 Para hacer la salsa: Lavar los tomates, cortar cada uno en 8 rodajas, retirar las
  • semillas y cocinar en un poco de agua hirviendo hasta que estén blandos.
  • 4 Escurrir el agua y reservar. En una olla antiadherente, sofreír la cebolla con un poco de agua. Adicionar las rodajas de tomate y dejar que se aclare.
  • 5 Cuando esté casi listo, añadir sal al gusto, el aceite y la albahaca. Por último, licuar la mezcla hasta que quede cremosa.
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