El 19 de octubre de 2025, en una ceremonia histórica en Roma, el Vaticano lo canonizó, convirtiéndolo, junto a la Madre Carmen Rendiles, en el primer santo hombre venezolano

Venezuela celebra la primera Festividad de José Gregorio Hernández como santo este domingo-. La población venezolana se une en oración y recuerdo para conmemorar el natalicio de José Gregorio Hernández Cisneros, el venerable “Médico de los Pobres”, quien recientemente lo elevaron a la dignidad de los altares. Nacido el 26 de octubre de 1864 en el pintoresco pueblo de Isnotú, estado Trujillo, su vida fue un faro de ciencia, fe y caridad que, un siglo después de su muerte, lo ha convertido en el primer santo del país.
El doctor fue pionero de la medicina moderna, graduado con honores como médico en la Universidad Central de Venezuela (UCV) en 1888, fue enviado a París y Berlín por el gobierno venezolano para profundizar en sus estudios. Regresó al país en 1891 e introdujo el microscopio en Venezuela, fundó la cátedra de Bacteriología, además de ser pionero en áreas como Histología Normal y Patológica. En resumidas palabras, modernizó la enseñanza de la medicina en el territorio nacional.
Aparte de su vida educativa, sentía un profundo sentido de la caridad, que lo llevó a dedicarse incansablemente a la atención de los más necesitados, especialmente en los barrios humildes de Caracas. Se le conoce popularmente como el “Médico de los Pobres” porque nunca cobraba a quienes no podían pagar. Su vocación no se limitaba a curar cuerpos, sino a consolar almas.
A pesar de su intensa actividad profesional y académica, intentó varias veces la vida monástica. Sin culminarlo, se asumió como un laico consagrado que encontró su camino a la santidad en el ejercicio de su profesión y la ayuda al prójimo. Cabe destacar que fue terciario franciscano.
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La vida terrenal de Hernández terminó de manera trágica y repentina el 29 de junio de 1919, cuando lo atropellóun vehículo en una calle de La Pastora, Caracas, mientras cruzaba para comprar medicinas para un paciente. A pesar de su muerte prematura, su fama de santidad y los milagros atribuidos a su intercesión crecieron exponencialmente.
El proceso formal para su canonización comenzó en 1949. El Papa Juan Pablo II lo declaró Venerable en 1986, reconociendo sus virtudes heroicas; mientras que en 2020, el Papa Francisco aprobó el milagro de la curación inexplicable de la niña Yaxury Solórzano Ortega, quien sufrió una herida de bala en la cabeza. Este milagro abrió el camino a su beatificación en 2021.
Asimismo, su paso final a la santidad fue alcanzado tras la aprobación de un segundo milagro. El 19 de octubre de 2025, en una ceremonia histórica en Roma, el Vaticano lo canonizó, convirtiéndolo, junto a la Madre Carmen Rendiles, en el primer santo hombre venezolano.
Sus restos reposan en la Iglesia de La Candelaria, donde la fe de todo un pueblo continúa acudiendo a él para pedir salud e intercesión.
La conmemoración de su natalicio es un recordatorio de que la santidad no es ajena a la vida cotidiana, y que servir con amor y profesionalismo, como lo hizo José Gregorio Hernández, es el legado más grande que puede dejar un venezolano.
EO/// Con información de: Globovision
