Paredes deterioradas y rayadas, camillas sin colchones ni colchonetas son parte de las fallas que se ven en este espacio

En deplorables condiciones atienden desde hace un tiempo a sus pacientes los médicos de la sala de yesos del Hospital Universitario “Dr. Manuel Núñez Tovar”, de Maturín.

Los trabajadores sanitarios brindan su atención a los más de 150 pacientes que llegan a diario con algún tipo de fractura al área que tiene sus paredes deterioradas y rayadas, las camillas sin colchones ni colchonetas, sillas que han sido improvisadas con cajas, tablas sobrantes y una que otra baldosa que quedo de otra reparación.

El paciente Joaquín Alvarado, dijo que “aquí el equipo médico, liderado por profesionales del área y acompañado por estudiantes de 4 y 5 año de fisioterapia, hace un esfuerzo sobrehumano por atender a los pacientes, sin aire acondicionado sin insumos, sin guantes ni nada, sólo con su conocimiento”.

“Aquí tienen a los mejores profesionales, trabajando en las peores condiciones, para acá es que deben traer al Gobernador”, resaltó Alvarado, quien asiste a consulta de rutina por una fractura en la pierna.

Por su parte, José Martínez, con una fractura de brazo, señaló que “tuve que comprar todos los insumos, pero eso es lo de menos porque la atención y la humildad de los médicos sobrepasa las barreras, Dios permita que les rescaten este espacio de trabajo más ahora que anuncian mejoras en los centros de salud del estado”.

Ante esta situación, los galenos y estudiantes de esta área exhortan al Gobierno regional a darle un “cariñito” a la sala donde llegan los pacientes traumatizados y con fracturas.

EO// Nota de prensa