Ayudar al prójimo con depresión implica ofrecer apoyo emocional, comprender la enfermedad y actuar de manera responsable y respetuosa
Ser un buen ciudadano significa ser compasivo y comprensivo con los demás – La depresión es una enfermedad mental grave que puede afectar a cualquier persona, sin importar su edad, género, raza o condición socioeconómica. Se caracteriza por una tristeza persistente, pérdida de interés en las actividades que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y el sueño, dificultad para concentrarse, fatiga y sentimientos de culpa o inutilidad.
Ser un buen ciudadano implica ser compasivo y comprensivo con las personas que nos rodean, especialmente con aquellas que están pasando por momentos difíciles como la depresión. Podemos ofrecer nuestra ayuda de diversas maneras:
Qué hacer:
Escucha con atención y sin juzgar: Lo más importante que puedes hacer por alguien con depresión es escucharlo con atención y sin juzgarlo. Deja que exprese sus sentimientos sin interrupciones y hazle saber que estás ahí para él o ella.
Ofrece tu apoyo: Hazle saber a la persona que estás ahí para apoyarlo en lo que necesite. Esto puede incluir ayudarlo con tareas cotidianas, acompañarlo a citas médicas o simplemente estar ahí para hablar.
Anímalo a buscar ayuda profesional: La depresión es una enfermedad que requiere tratamiento profesional. Anima a la persona a que busque ayuda de un psicólogo o psiquiatra. Puedes ofrecerle ayuda para encontrar un profesional o acompañarlo a su primera cita.
Respeta sus límites: Es importante respetar los límites de la persona. Si no quiere hablar o no quiere tu ayuda, no lo presiones.
Cuídate a ti mismo: Ayudar a alguien con depresión puede ser emocionalmente agotador. Es importante que cuides tu propia salud mental y física. Asegúrate de dormir lo suficiente, comer sano y hacer ejercicio regularmente.
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Lo que no se debe hacer:
No juzgues ni critiques: La depresión no es una debilidad o un defecto de carácter. No juzgues ni critiques a la persona por cómo se siente o cómo actúa.
Minimices sus problemas: No le digas a la persona que “simplemente se anime” o que “sus problemas no son tan graves”. Esto solo empeorará las cosas.
No trates de arreglarlo todo: No puedes arreglar la depresión de la persona por ella. Lo mejor que puedes hacer es ofrecer tu apoyo y comprensión.
No le des consejos no solicitados: No le des consejos a la persona sobre cómo debe superar su depresión. A menos que sea un profesional de la salud mental, es mejor que te limites a escuchar y ofrecer apoyo.
No esperes resultados inmediatos: La recuperación de la depresión lleva tiempo. No te desanimes si la persona no mejora de inmediato.
Recuerda: Ser un buen ciudadano significa ser compasivo y comprensivo con los demás. Si conoces a alguien que está luchando contra la depresión, ofrécele tu apoyo y comprensión. Puedes hacer una gran diferencia en su vida.
Nota de Prensa