No dudes en consultar a un dermatólogo si tienes preguntas sobre cuándo es el momento adecuado para comenzar tu rutina de cuidado de la piel
Rutina facial esencial a los 20: limpia, protege e hidrata tu piel-. La piel cambia con la edad, requiriendo ajustes en nuestras rutinas de belleza. A los 20, aunque la piel femenina suele ser óptima, la Inteligencia Artificial sugiere inicios de envejecimiento, demandando cuidados básicos adaptados.
Esta etapa fresca de la post-adolescencia no implica descuido; los daños presentes afectan el futuro. Evitar manipularla agresivamente y la exposición solar prolongada es crucial. Establecer una rutina básica con limpieza suave, hidratación y protección solar sienta las bases para una piel sana y joven a largo plazo. Ignorar las necesidades ahora puede tener consecuencias futuras. Invertir en cuidado a los 20 asegura belleza duradera.
Te puede interesar: Adiós al molesto encrespamiento o Frizz
Por ello, sigue esta rutina sencilla, pero eficaz:
1. Limpieza. Utiliza un limpiador suave para eliminar la suciedad, la grasa y el maquillaje. Evita irte a dormir sin cumplir con este paso.
2. Hidratación. Elige un humectante ligero y adecuado a tu tipo de piel. Aplica una vez al día.
3. Protección solar diaria. Este es el paso más importante de tu rutina de cuidado de la piel, sin importar tu edad. Busca un protector solar con un SPF de 30 o superior y protección de amplio espectro. Este es un producto que debes aplicar todos los días, aunque no te vayas a exponer al sol o el día esté nublado.
Expertos señalan que durante la adolescencia es un buen momento para comenzar a cuidarse la piel, sin embargo, si crees que es muy pronto, consulta con un dermatólogo para que te oriente, pues todo va a depender del tipo de piel.
De la misma forma, en Vogue recomiendan, evitar el uso de jabones o productos demasiado agresivos al limpiar la piel; también se debe evitar el uso de toallitas desmaquillantes de forma habitual, porque esto puede hacer que se pase el acné a otras partes del rostro, por ejemplo. Finalmente, y no menos importante, se debe evitar compartir la toalla.
EO// con información de Diario 2001