La estimación la hizo el analista en temas de frontera, William Gómez, al destacar que esos fletes representaron una pérdida de más de 2.400.000 dólares
Pérdidas de 2.4 millones de dólares por represamiento de gandolas en frontera tachirense

Pérdidas de 2.4 millones de dólares por represamiento de gandolas en frontera tachirense-. Más de 1.200 fletes dejaron de percibir las empresas venezolanas de transporte de carga pesada durante los ocho días de represamiento de casi 400 gandolas en las almacenadoras y estacionamientos privados del eje San Antonio del Táchira – Ureña, a causa de la afectación vial en el tramo de Campo Alegre.

La estimación la hizo el analista en temas de frontera, William Gómez, al destacar que esos fletes representaron una pérdida de más de 2.400.000 dólares, además de los gastos que tuvieron que asumir los importadores por días adicionales de almacenaje de mercancías y seguro.

Gómez resaltó que este escenario evidenció el gran deterioro que viene registrando las vías de acceso a la frontera, que son empleadas por el transporte de carga pesada, como lo son la ruta por El Vallado, que conecta con la autopista San Cristóbal – La Fría para empalmar con la vía Panamericana; y la de La Petrólea que conecta con la Troncal 5, vial al llano. La mayoría paga dos peajes antes del salir del Táchira.

Te puede interesar: Aumento de un 37.78% en mayo de los depósitos de divisas en la banca nacional

«Desde la reactivación de la frontera con el paso de gandolas por los tramos binacionales, el pasado 26 de septiembre 2022, el Gobierno nacional no ha hecho una inversión importante para la recuperación total de estas vías, enfocándose solo en reparaciones menores cuando se presentan colapsos en ciertos tramos», subrayó al dejar por sentado la importancia que tienen estás vías para la economía del país, pues el 70% de los vehículos de carga se moviliza por la frontera de Táchira con Norte de Santander.

El analista en temas de frontera advirtió que de no haber una pronta intervención en las vías, que permitan su funcionamiento óptimo y permanente, se corre el riesgo de que los importadores migren hacia la frontera de Paraguachón como Maicao, perjudicando así los empleos formales, directos e indirectos, que se han generado por parte de los auxiliares de la administración aduanera (transporte, almacenadoras y agentes aduanales).

EO // Con información de: Diario La Nación