La dedicación y el valor que aportan estos profesionales en la atención de los niños venezolanos son fundamental para garantizar un futuro saludable
Pediatra: los niños son los ángeles preferidos de Dios, seres puros e inocentes que merecen lo mejor. El 20 de enero se celebra en Venezuela el Día del Pediatra, una fecha dedicada a honrar la hermosa profesión de atender a muchos niños y adolescentes. Esta celebración tiene sus raíces en el año 1939, cuando se fundó la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría, y su primer presidente, el Dr. Gustavo Machado, proclamó el 20 de enero como el día de celebración del pediatra en Venezuela.
La labor de los pediatras en Venezuela es de un grato valor, ya que día a día se dedican a atender y cuidar a los niños del país. Su compromiso con la salud y el bienestar de los más pequeños es digno de reconocimiento y gratitud. La dedicación y el valor que aportan estos profesionales en la atención de los niños venezolanos son fundamental para garantizar un futuro saludable para las generaciones en los próximos años.
En esta ocasión, vamos a rendir homenaje a esta maravillosa profesión lo que es pediatría, y conoceremos sus experiencias y expectativas de estos increíbles doctores, para que conozcan sus historias que los han llevado a dedicar sus vidas al cuidado de los más pequeños, así como las metas y aspiraciones que los impulsan a seguir brindando atención médica:
El reconocido doctor Manuel Velásquez pediatra con más de 37 años de experiencias, graduado de la Universidad Central de Venezuela (UCV) con postgrado en puericultura y pediatría, expreso la labor de un pediatra, más que una profesión, es una bendición de Dios, el ser pediatra es un acto de amor y servicio que les permite atender a los niños, brindarles atención médica, humana y afectiva, resaltando que es un regalo invaluable que les permite estar cerca de los seres más sensibles y hermosos de la sociedad. Señaló que los niños no solo representan el futuro, sino también el corazón mismo de la familia y de la sociedad en general.
Velásquez destacó que tener la posibilidad de cuidarlos, llevarles salud y, en muchos casos, salvar vidas, es un privilegio que lo llena el corazón de gratitud y honor, que los niños son los ángeles preferidos de Dios, seres puros e inocentes que merecen lo mejor, tener esa oportunidad de atenderlos es un acto de responsabilidad que los llena de amor y así cada día en la consulta pediátrica, es una oportunidad para demostrar su compasión, paciencia y dedicación, enfatizó que como pediatras, están llamados a ser guardianes del bienestar infantil, no solo desde el punto de vista médico, sino también desde una perspectiva emocional y afectiva. Su compromiso va más allá de tratar enfermedades se extiende a promover la salud integral y el desarrollo armonioso de cada niño.
El pediatra Manuel Velásquez destaca también la importancia de la actualización constante en el conocimiento médico y el valor que tiene la experiencia que aporta a su desempeño profesional. Su firme convicción de volver a elegir la medicina y específicamente la pediatría, así como su deseo de nacer nuevamente en Venezuela, resalta su pasión por su trabajo y su país. Su trayectoria de tantos años como pediatra es un ejemplo del compromiso y la dedicación que los profesionales de la salud deben tener.
Por su parte el doctor Jorge Bonini es un reconocido pediatra/neonatólogo con más de 48 años de experiencia en el campo de la medicina. Su amplio conocimiento y dedicación se han convertido en un referente para el cuidado de los recién nacidos y el apoyo a los padres y familiares.
Bonini destacó, su labor como intensivista neonatal, que demuestra su dedicación y compromiso con la salud de los bebés, su trayectoria profesional lo ha posicionado como un experto en orientar a los padres y familiares ante situaciones que puedan presentar los bebés, brindando la mejor atención posible para evitar traumas innecesarios. Resaltó la importancia de ser pediatra, que es una responsabilidad que va más allá de la práctica médica, implica influir significativamente en la vida de los más pequeños y sus familias, aplicando conocimientos y experiencia para brindar el mejor cuidado posible.
Indicó que ser pediatra se convierte en un segundo padre, asumiendo un alto índice de responsabilidad en el bienestar y la salud de los niños, desde el momento en que los padres confían en el pediatra para el cuidado de sus hijos, se establece un vínculo de confianza y apoyo mutuo, tambien señala que su labor no solo consiste en diagnosticar y tratar enfermedades, sino también en orientar y apoyar a los padres en la adaptación adecuada a las situaciones que puedan presentar los bebés y por lo tanto es fundamental armonizar la felicidad dentro del seno familiar, brindando tranquilidad y seguridad a los padres.
El equipo de El Oriental de Monagas, en un gesto lleno de cariño y gratitud, felicitamos a todos esos valiosos doctores que con su amor y dedicación, hacen posible la atención médica de los niños en la región, el reconocimiento hacia estos profesionales es un acto que resalta su importancia positiva en la sociedad. Es admirable ver cómo se valora el esfuerzo y el compromiso de quienes dedican su vida a cuidar la salud de los más pequeños Felicidades a todos los pediatras.
EO// Redacción de: Durfelix Rivas