Aunque ahora puede parecer imposible, llegará el momento en el que te sentirás en paz con lo que ha pasado
Nunca se está preparado para perder a un ser querido

Nunca se está preparado para perder a un ser querido-. Hay pocas cosas que pueden compararse con el dolor de perder a un ser querido. A tener la certeza de no volver a compartir con alguien que fue un pilar de tu vida. Miles de preguntas se te pasarán por la mente. Estarás cuestionándote todo ahora que no está.

A decir verdad, la conmoción siempre da paso a la rabia. Sientes incredulidad, porque no terminas de creer lo que está pasando. Vives incluso un sentimiento de culpa por lo que te habría gustado poder hacer y te invade una tristeza que parece no tener final.

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Más el duelo es un proceso que puede durar años, y es válido. Se aprende a vivir con su ausencia, recordando los momentos compartidos. Porque es lo que habría querido, que lo recuerdes con afecto, con una sonrisa, cada vez que pienses en él.

No existe una forma correcta o incorrecta de sobrellevar esa pérdida. Es normal que el dolor robe el sueño, que comer sea un desafio, o que solo tengas deseos de llorar. Es un proceso personal que lleva su tiempo, algo lento que no debe forzarse. Porque no existe un «tiempo normal» para el duelo.

No estás solo en el camino, y aunque ahora puede parecer imposible, llegará el momento en el que te sentirás en paz con lo que ha pasado.

EO// Redacción de Adriana Semprún