El estudio también aporta información sobre la historia demográfica y la organización social de los mamuts colombinos
Los mamuts que habitaron en lo que hoy es México revelan secretos a través de su ADN

Los mamuts que habitaron en lo que hoy es México revelan secretos a través de su ADN-. Cuando pensamos en mamuts, esos enormes animales que existieron hace miles de años, solemos imaginarlos desplazándose por regiones frías y lejanas, como Siberia. Sin embargo, en realidad estuvieron mucho más cerca de nosotros de lo que comúnmente se cree.

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Dos especies de mamuts poblaron el continente americano: el mamut lanudo (Mammuthus primigenius), originario de Eurasia y con un rango geográfico que abarcó gran parte de la región holártica; y el mamut colombino (Mammuthus columbi), la única especie continental originaria de América.

Se ha estudiado más al mamut lanudo debido a que su ADN antiguo se conserva mejor en los climas fríos del norte, lo que facilita su análisis genético. En cambio, el mamut colombino habitaba zonas más templadas de Norteamérica y Centroamérica, donde la preservación del ADN es más difícil. Por ello, los estudios sobre esta especie son más limitados y presentan vacíos de información.

Una investigación publicada recientemente en Science contribuye a llenar algunas de esas lagunas. El estudio, realizado con la participación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) de México, descubrió que el mamut colombino que habitó lo que hoy es México pertenecía a un linaje distinto al de sus parientes en Estados Unidos y Canadá, los cuales están más cercanamente relacionados con los mamuts lanudos.

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Los mamuts colombinos ocuparon gran parte del territorio actual de México. La Cuenca de México, área metropolitana de la Ciudad de México, concentra el mayor número de restos paleontológicos de esta especie en todo el país.

Durante la construcción del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, entre 2019 y 2022, en la antigua base militar de Santa Lucía, se recuperaron más de 70,000 restos fósiles de megafauna. Al menos dos tercios fueron identificados preliminarmente como pertenecientes a más de 110 mamuts individuales.

Asimismo, diez individuos de mamut fueron excavados entre 2016 y 2019, a 20 km al suroeste de Santa Lucía, en el municipio de Tultepec.

En el estudio, los investigadores obtuvieron 61 genomas mitocondriales de mamuts colombinos, los primeros datos genéticos de esta especie en latitudes tropicales. Para comprender mejor su evolución y distribución, compararon estos genomas con secuencias de mamuts colombinos y lanudos de Canadá, Estados Unidos y Eurasia.

Se analizaron 83 molares de mamut para extraer ADN antiguo: 73 de Santa Lucía y 10 de Tultepec. De estas muestras, 66 mostraron suficiente ADN, baja contaminación y duplicación mínima, lo que permitió identificar con seguridad 18 hembras y 25 machos.

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“Descubrimos que la diversidad genética mitocondrial de los mamuts colombinos que habitaron la Cuenca de México es distinta a la de los de Canadá y Estados Unidos. En México existieron tres sublinajes diferentes entre sí, que coexistieron hacia el final del Pleistoceno (hace 12,700 años)”, explicó Federico Sánchez Quinto, investigador del Laboratorio de Paleogenómica y Biología Evolutiva del LIIGH, citado por el INAH.

Esto indica que los mamuts colombinos de la Cuenca de México no conformaban un grupo genéticamente uniforme, sino que coexistían linajes distintos al mismo tiempo, mostrando una mayor diversidad genética local que sus parientes del norte.

En otras palabras, aunque pertenecían a la misma especie, estos mamuts tenían orígenes mitocondriales diversos, lo que sugiere que las poblaciones se mantuvieron parcialmente separadas por factores geográficos o sociales antes de mezclarse, y que la región tropical mexicana albergaba una variabilidad genética significativa hasta su extinción hacia finales del Pleistoceno.

El estudio también aporta información sobre la historia demográfica y la organización social de los mamuts colombinos.

EO// Información de: ElEspectador