Tener una ciudad limpia, es responsabilidad de todos, coloca la basura en el lugar y horario que corresponda. Evitemos la proliferación de roedores, insectos y enfermedades.

Calle Giraldot. Maturín. Monagas.

La ciudad limpia: Un esfuerzo compartido. — Imagina que acabas de lavar el último plato y de repente alguien aparece con una pila de ollas, vasos y cubiertos sucios, para que continúes fregando. Así mismo se sienten los trabajadores del aseo urbano cuando, minutos después de haber recorrido las calles del centro de la ciudad, un habitante desconsiderado arroja sus desechos en la isla o la acera.

Considerar el trabajo de los demás es un acto que denota educación y empatía. Debemos comprender que existen horarios para cada actividad y que la labor de los empleados públicos merece respeto. El llamado es a ser conscientes y responsables, a demostrar un poco más de empatía y procurar colaborar al máximo posible con quienes se encargan de mantener nuestra ciudad limpia y aseada.

Vivir en un lugar limpio

A todos nos gusta vivir en lugares limpios, donde se respire aire fresco y el ambiente sea agradable. Con base en este deseo, que para muchos es una exigencia, te invitamos a convertirte en un ciudadano cooperante y responsable.

En El Oriental de Monagas te sugerimos algunos prácticos consejos para evitar que nuestras calles se llenen de desechos:

Consulta con el líder de tu comunidad el horario de recolección de basura y respétalo.
Saca la basura minutos antes de que pase el camión del aseo urbano para evitar que perros, gatos o roedores rompan las bolsas.
Si la brisa o algún animal arrastra un desecho hasta el frente de tu residencia o negocio, no esperes a que alguien lo limpie por ti. Tómate unos minutos y mantén limpio tu espacio.
En lugar de responsabilizar o criticar las labores gubernamentales, te invitamos a poner tu granito de arena y contribuir en la limpieza, desmalezamiento y embellecimiento de las áreas que rodean tu casa o empresa.
Si todos colaboramos, tendremos una ciudad limpia, un ambiente agradable y, por ende, ciudadanos más felices. Colabora, sé parte de la solución y no del problema.

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Recuerda: ¡La limpieza de la ciudad es responsabilidad de todos! Juntos podemos hacer la diferencia.

EO // Redacción Marinés Rivas.