En Costa Rica, donde Intel empleaba a más de 3.400 personas, la consolidación llega en forma de cierre de operaciones de ensamblaje y pruebas

Intel redefine su futuro con recortes masivos y apuesta reforzada por la inteligencia artificial – Intel atraviesa una de las etapas de ajuste más profundas de su historia reciente. La compañía tecnológica planea terminar el año con alrededor de 75.000 empleados principales, frente a los 99.500 contabilizados a finales de 2024.
En términos netos, la reducción impactará a unas 24.000 personas, cerca de una cuarta parte de la plantilla total al cierre del año pasado. Además, el grupo ha vendido otras divisiones y ha acelerado la simplificación de su estructura global.
El impulso para estos recortes proviene directamente del nuevo CEO, Lip-Bu Tan. El ejecutivo busca transformar y aplanar la organización tras años de dificultades y resultados poco satisfactorios, especialmente ante el auge de la inteligencia artificial y la competencia creciente en semiconductores.
El proceso de ajuste se ha intensificado en los últimos meses. A finales de junio, Intel cerró su división de chips para automóviles y comunicó la eliminación de hasta el 20 por ciento de los puestos en sus fábricas de silicio. En julio, la compañía separó completamente su área de visión artificial RealSense.
El resultado es una retirada organizada de iniciativas de alto costo y presencia internacional. En Alemania y Polonia, Intel renuncia a sus planes de construir megafábricas que habrían empleado a cerca de 3.000 personas en Alemania y 2.000 en Polonia.
Leer también: Estudiante de Florida crea una trampa con IA para detectar mosquitos con enfermedades
Ambas inversiones, estimadas en decenas de miles de millones de dólares, quedan canceladas. Aunque Intel mantiene su centro de I+D en Polonia (presente en esa región desde 1993), la empresa prioriza ahora proyectos con demanda concreta y plazos claros, evitando la fragmentación innecesaria que, según Tan, ha lastrado el rendimiento de la compañía en los últimos años.
En Costa Rica, donde Intel empleaba a más de 3.400 personas, la consolidación llega en forma de cierre de operaciones de ensamblaje y pruebas, que serán concentradas en centros más grandes de Vietnam. De la plantilla costarricense, se estima que más de 2.000 trabajadores continuarán en funciones de ingeniería y departamentos corporativos.
Recortes similares afectan a Ohio, donde los trabajos de construcción de una nueva planta avanzarán a un ritmo sensiblemente más lento, alineando el gasto de capital con la demanda prevista.
Desde Intel se ha señalado haber completado la mayor parte de las acciones para reducir su plantilla principal en torno a un 15 por ciento, aunque no descarta ajustes adicionales conforme evolucione el año.
EO// con información de: El Aragüeño