Es importante reconocer la mayor apertura emocional y el compromiso con el cambio social de las nuevas generaciones

¿Estamos criando generaciones demasiado frágiles-. La generación de ahora, denominada como «generación de cristal» se refiere a la idea de que las generaciones más jóvenes, como la Generación Z, son más sensibles y vulnerables emocionalmente, mostrando poca tolerancia a la frustración y dificultad para manejar críticas o situaciones adversas.
Sin embargo, algunos expertos argumentan que esta percepción es un mito y que las nuevas generaciones son más conscientes de su salud mental y más abiertas a hablar sobre sus emociones, lo que no necesariamente implica debilidad.
Muchas personas entran en debate sobre este tema, en sí, no se tiene una respuesta única sobre saber si esta generación se ha visto más frágil que las pasadas, sabemos que este mundo donde todo está evolucionando y cambiando diariamente, las personas también lo hacen.
Los jóvenes ahora tienden a expresar lo que sienten, sus inseguridades y los problemas que le llegan a afectar, no es que no sean fuertes, solo se muestran tal cual son y esto es considerado «frágil» porque las generaciones pasadas no mostraban sus problemas y no hablaban sobre su salud mental.
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Es fundamental encontrar un equilibrio entre proteger a los niños y jóvenes y permitirles desarrollar la resiliencia y las habilidades necesarias para enfrentar los desafíos de la vida adulta, no sobreprotegerlos del mundo, pero sí enseñarles que hay peligros que se ocasionan en un instante y sobre todo educarlos desde el amor, enseñarles que se puede cometer errores y aprender a resolverlos de la mejor manera.
Los niños y jóvenes crecen viendo un ejemplar, lo cual son los padres, sé un ejemplo de cómo manejar las emociones, resolver problemas y tomar decisiones debido a que ellos te ven como un ejemplo a seguir.
Si bien, no es fácil conseguir una línea recta en la crianza de un niño, todo va a depender de un nivel y de la situación. Desarrollar una personalidad fuerte, resiliente y capaz de afrontar los desafíos de la vida, sin necesidad de sobreprotegerlos, esto ayudaría a demostrar que esta generación no es frágil, sino que es suficiente y que se puede seguir evolucionando y mejorando sus capacidades.
Redacción de: Heidi Campos