Investigadores de la Universidad de Otago indican que la interacción digital al acostarse afecta gravemente la calidad del reposo en los jóvenes

El uso de pantallas en la cama afecta el sueño en adolescentes-. El uso de dispositivos digitales antes de dormir ha sido un tema recurrente en las preocupaciones de padres y expertos durante años. Durante mucho tiempo, se ha advertido sobre los riesgos de la exposición a las pantallas antes de acostarse, principalmente debido a la posible alteración de los patrones de sueño en los adolescentes.
Te puede interesar: Científicos revelan la clave para fortalecer la regeneración del hígado tras un daño agudo
Estudios recientes, en la Universidad de Otago analizaron cómo el uso de dispositivos electrónicos, en especifico en la cama, afectaba la calidad y duración del sueño en los jóvenes.
Concluyeron con que usar pantallas en la cama resultó ser más perjudicial para el descanso que usar dispositivos durante las horas previas a acostarse. Este descubrimiento desafía las pautas tradicionales sobre el uso de pantallas antes de dormir y abre una conversación sobre las estrategias más efectivas para mejorar el sueño adolescente.
Durante un tiempo se han recomendado evitar el uso de pantallas al menos una o dos horas antes de dormir. No obstante, este estudio arrojó datos que cuestionan esta creencia. Según los resultados, el tiempo frente a la pantalla durante las dos horas previas a acostarse tuvo poco efecto sobre la calidad del sueño. Mientras que el uso de pantallas una vez en la cama tuvo consecuencias más significativas.
El estudio también reveló que las actividades más interactivas en las pantallas, como los videojuegos y el multitasking. Por ejemplo, ver una película en una laptop mientras se juega en una consola. Tenían un impacto particularmente negativo.
A medida que se conocen más detalles sobre cómo las pantallas afectan el sueño, los investigadores proponen que la solución no está en las restricciones de tiempo frente a la pantalla. Sino en cómo y cuándo los adolescentes interactúan con sus dispositivos.
Evitar el uso de pantallas en la cama podría ser un paso clave hacia la mejora de la calidad del sueño en los jóvenes, lo que, a su vez, podría tener efectos positivos en su bienestar general.
EO// con información de: Infobae