Los ovarios envejecen más rápido que cualquier otro órgano del cuerpo
El secreto del envejecimiento se encuentra en los ovarios.

El secreto del envejecimiento se encuentra en los ovarios. El ovario es una máquina del tiempo. Viaja al futuro y llega a la vejez antes que el resto del cuerpo. Al nacer, cada ovario contiene alrededor de un millón de folículos, pequeños sacos llenos de líquido que contienen óvulos inmaduros.

Pero la disminución de estos folículos es inmediata e incesante. En la pubertad, solo quedan unos 300 mil folículos. A los 40 años, la gran mayoría ya han desaparecido. Y a los 51, la edad promedio de la menopausia.

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Los humanos somos una rareza en este sentido, la pérdida de hormonas durante la menopausia desencadena una serie de efectos negativos para la salud: los huesos se vuelven quebradizos, el metabolismo se hace más lento y aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, derrames cerebrales y demencia. Paradójicamente, las mujeres viven más que los hombres en promedio, pero pasan más años con una mala salud.

La relación de los ovarios con el envejecimiento de todo el cuerpo

Jennifer Garrison tiene la corazonada de que los ovarios son los culpables. “Ese coctel, esa orquesta de sustancias químicas que fabrican los ovarios, es verdaderamente importante para la salud en general“, destaca Garrison, profesora del Instituto Buck de Investigación sobre el Envejecimiento de Novato (California). “Cuando desaparece en la menopausia, tiene un efecto dramático“. Por otra parte, tener ovarios en funcionamiento durante más tiempo parece conllevar beneficios para la longevidad. Un estudio con 16 mil mujeres descubrió que una menopausia más tardía aumentaba las probabilidades de vivir hasta los 90 años.

A pesar de que la mitad de la población mundial experimenta el envejecimiento ovárico, incluidas las mujeres cisgénero y las personas trans y no binarias, el persistente sesgo de género en la ciencia significa que sigue siendo un campo poco estudiado. Pero eso está empezando a cambiar.

También es difícil estudiar el envejecimiento ovárico en especies tan longevas, las orcas, por ejemplo, pueden vivir hasta 90 años en libertad. En cambio, los investigadores han intentado muchas veces descifrar la relación entre la menopausia y el envejecimiento por aproximación: observando los efectos de la quimioterapia sobre la fertilidad, estudiando un tratamiento común de la menopausia que imita las hormonas femeninas.

El problema del sesgo de género en la investigación sobre el envejecimiento

Nadie sabe a ciencia cierta si es posible mantener los ovarios en funcionamiento durante más tiempo, ni si eso conducirá a una vida más larga y saludable.

EO//Con información de: WIRED