Los dálmatas tienen una gran resistencia física, lo que les valía para resistir las largas caminatas al lado de los carros
Descubre por qué el dálmata es considerado un perro bombero – Históricamente, los dálmatas eran mucho más que simples mascotas. Su resistencia, energía y lealtad los convirtieron en compañeros ideales para los bomberos. Corriendo junto a los carruajes tirados por caballos, despejaban el camino, protegían a los equinos y, en cierta forma, se convertían en una especie de alarma viviente, anunciando la llegada de los bomberos.
Los dálmatas son perros grandes que llegan alcanzar los 35 kilogramos de peso y más de medio metro de altura. Sus características orejas caídas y sus manchas negras son lo que más llama la atención de ellos. Poseen un cuerpo esbelto y musculoso, así como un pelo corto y suave que hay que cepillar a menudo durante la muda.
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Al nacer, los dálmatas son totalmente blancos, las manchas no aparecen hasta las 2 semanas, aproximadamente.
Se trata de una raza con una gran energía, muchas ganas de jugar y, además, de carácter sensible. Aprenden con facilidad, por lo que la educación resulta sencilla siempre y cuando se haga desde la perspectiva en positivo y se sea constante.
La asociación entre dálmatas y bomberos es un testimonio de la profunda conexión que puede existir entre humanos y animales. Nos recuerda cómo, a lo largo de la historia, los perros han sido nuestros compañeros fieles, ayudándonos en tareas tan diversas como la caza, el pastoreo y, en este caso, el combate de incendios.
EO// Nota de Prensa