Maritza Naranjo, quien hace más de tres años aportó el 30 % del pago de una vivienda, denunció ser víctima de la dueña anterior de la casa
Denuncian estafa y acoso por compra de vivienda en Margarita. Más de tres años de un tormentoso acoso fueron suficientes para que Maritza Naranjo, agotara su paciencia y se pronunciara para denunciar la estafa de la que había sido víctima por la compra de una vivienda en la isla de Margarita.
A través de la red social Tik Tok, Naranjo contó los traúmaticos episodios vividos desde que en marzo del año 2019 asumió la compra de una residencia.
Según relató la residente del estado Nueva Esparta, en marzo del año 2019 realizó la compra de una vivienda, con un adelanto del 30 por ciento del pago, y luego de varias semanas, la vendedora del espacio habitacional “cambió las cerraduras sin decirme nada, dejándome fuera de la casa. Y para completar, me dijo que ya no vendería la vivienda y que el dinero que le había dado lo había perdido”.
En vista de ello, Naranjo formuló la denuncia ante los entes competentes logrando así, obtener nuevamente la potestad de la vivienda, a pesar de que la dueña anterior la había acusado ante distintos organismos de seguridad de invasión a la propiedad.
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Luego de lo sucedido en ese año, todo había transcurrido con normalidad hasta enero de este 2022, cuando nuevamente la anterior propietaria regresó a la vivienda, con dos funcionarios del Cicpc para realizar unas pesquisas, en ese momento, la cuidaban un tío y tía de Naranjo.
Tras la inspección, según relata la afectada, la victimaria con la ayuda de su esposo, volvió a cambiar la cerradura de la vivienda, para tomar el control de la misma, y el haber intentado evitar eso le costó el secuestro de los familiares de Naranjo.
“Por varios días estuve tratando de comunicarme con mi tío y mi tía, que son adultos mayores, pero no lograba ubicarlos. Fui a formular la denuncia ante Fiscalía, y cuando llegamos a la casa, nos encontramos con que mis parientes estaban retenidos por la señora y su esposo, quienes los mantenían sometidos y amenazados de muerte”, relató.
Naranjo cuenta que aunque los victimarios fueron detenidos y presentados ante el Juzgado, los liberaron bajo medidas cautelares por los cargos de privación ilegítima de libertad y resistencia a la autoridad, “dejando de un lado invasión a la propiedad, puede ser la dueña aún, pero ella tenía un documento, una opción a compra y venta conmigo, y no podía acceder a la casa de esa forma, porque estaba siendo ocupada por mí”.
“Primero, tenemos un contrato, le dí el dinero de reserva por esa casa. Segundo, la casa estaba ocupada tres años, y tengo todos los documentos requeridos para demostrar que soy pisataria de esa vivienda”, acotó.
Aún así, Naranjo asegura que la dueña de la vivienda ha seguido yendo al lugar, y le ha quitado poco a poco sus enseres, prueba que tiene a través de distintas grabaciones. “Yo lo que quiero es que esto se acabe, por favor, le pido a la Fiscalía General que hagan algo al respecto”, mencionó.
Redacción: José Alexander Piñango// El Oriental de Monagas