Creo que no hay un sentimiento más doloroso que experimentar una verdadera decepción, es un profundo vacío en nuestros corazones, nos sentimos tristes, frustrados, en algunos casos rabiosos, esa emoción nos acompaña hasta el momento en el que aprendemos a soltar
Cuando la decepción se convierte en una lección crucial-. Depositar demasiada fe en los demás o en un resultado en particular puede llevar a un gran dolor si se incumple la expectativa.
Definimos a través de recopilación web que la decepción es una emoción dolorosa que surge al descubrir que una persona, un evento o una situación no son como esperábamos. Es el resultado de un desajuste entre nuestras expectativas y la realidad.
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Partiendo desde este punto, debemos mencionar que esto puede abarcar todas las áreas de nuestras vidas, en el amor, laboral, familiar, de todas formas, se siente igual, eso va a cambiar simplemente dependiendo de nuestras actitudes, esa que podemos en práctica para enfrentar tal situación.
Aunque no es fácil, solo debemos pensar en nuestro bienestar, sé que no podemos controlar el sentimiento, decirle al corazón no sientas esto sino aquello y ya; pero lo que podemos hacer es quizás llorar todo lo que puedas para drenar, pero posteriormente debes y es necesario obligarte a soltarlo, considerar que nadie comprenderá tu duelo y solo tú estarás sufriendo y haciendo daño a tu ser interior, ese que necesita estar bien para que todo marche bien.
Es propicio decirte que repitas siempre primero yo, segundo yo y tercero yo …. Y que no serás el malo si decides alejarte de personas que solo te llenan de energías negativas con sus acciones, habladurías y demás, cuando empieces a hacerlo, verás los cambios, es necesario hacerlo.
Redacción de: Lcda. Carlenis Avendaño