Las playas en las que se hace surf son especialmente peligrosas por la presencia de corrientes de resaca, que poseen mucha fuerza y pueden incluso arrastrar a una persona desde la orilla hasta mar adentro.

En un estudio publicado en 2018 en Natural Hazards and Earth System Sciences, los investigadores concluyeron que las corrientes de resaca son la causa principal del 81,9 % de los rescates en las playas de surf estadounidenses, con una variación regional del 75,3 % (costa este) al 84,7 % (costa oeste).

Playa Zipolite, México. Esta playa de Oaxaca es famosa por sus fuertes corrientes y olas impredecibles. El oleaje puede ser extremadamente peligroso y son frecuentes los ahogamientos y los rescates de bañistas.

Playa Kilauea, Hawái. Nadie niega la belleza de esta playa, pero se localiza en una región volcánica activa. Las erupciones del volcán del mismo nombre y la liberación de gases tóxicos pueden suponer un gran peligro para los visitantes.

Playa de Boa Viagem, Brasil. Situada en Recife, Brasil, esta playa es conocida por ser el hogar de una gran población de tiburones. De hecho, los ataques de los escualos han sido un problema recurrente que han convertido a Boa Viagem en unas de las playas más peligrosas del mundo.

Vía: 800Noticias