El licenciado en psicología laboral Joel Díaz nos invita a cuestionar el “por qué” de las dificultades y enfocarnos en el “para qué”
Cambiar la actitud: La llave que abre la puerta a la paz – La vida, en su constante vaivén, nos presenta desafíos que ponen a prueba nuestra fortaleza. Cambiar la actitud puede ser la clave al momento de afrontar las dificultades en lugar de evitarlas.
No se trata de negar o minimizar los problemas, sino de enfrentarlos con una actitud positiva y serena. Desde pequeños, podemos aprender a ver las dificultades como oportunidades para crecer. En lugar de quedarnos atrapados en el problema inmediato, podemos enfocarnos en las lecciones que el desafío nos presenta, para así fortalecernos a partir de la experiencia.
Inculcar en los niños la importancia de mantener una buena actitud y pensar en positivo ante cualquier eventualidad es fundamental. Historias y cuentos con finales no felices, pueden ser herramientas valiosas para enseñarles a aceptar la realidad en todas sus facetas.
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El cantautor argentino Facundo Cabral decía: “No estás deprimido, estás distraído” esta popular frase sugiere que la tristeza a menudo se origina en nuestra incapacidad para apreciar la belleza y la abundancia que nos rodea. Nos distraemos con pensamientos negativos y problemas, perdiendo de vista las cosas buenas que tenemos en nuestras vidas.
Por su parte, el licenciado en psicología laboral Joel Díaz nos invita a cuestionar el “por qué” de las dificultades y enfocarnos en el “para qué”, es decir, en el aprendizaje y crecimiento que estas pueden aportarnos.
Si nos encontramos ante una situación que emocionalmente nos supera, lo que debemos cambiar no es la situación en sí, sino nuestra actitud ante ella. Abordarla con una perspectiva diferente, buscando soluciones creativas y enfocándonos en nuestras fortalezas, nos permitirá encontrar la paz interior incluso en medio de la tormenta.
EO // Redacción Marinés Rivas