Lo que comenzó como una apuesta arriesgada que pocos se atrevieron a financiar, se convirtió en el pilar fundamental del imperio Disney y en una revolución técnica que sigue vigente casi un siglo después
Blancanieves arriba a sus 88 años-. Un 21 de diciembre, en 1937, las pantallas del Carthay Circle Theatre de Los Ángeles se iluminaron para presentar al mundo a la primera princesa de Disney. «Blancanieves y los siete enanitos» celebra hoy 88 años de vida, consolidada no solo como un clásico infantil, sino como la obra maestra que redefinió el lenguaje visual de la animación.
En su momento, la industria dudaba del proyecto. Se le llegó a conocer como «la locura de Disney», pues casi nadie estaba dispuesto a financiar un largometraje animado de tal magnitud. Sin embargo, tras su estreno, el filme no solo destrozó récords de taquilla, sino que demostró que los dibujos animados podían transmitir emociones profundas y tener «alma».
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El legado de Blancanieves se sostiene sobre innovaciones que hoy son estándares en la industria:
- La Cámara Multiplano: Esta herramienta permitió crear una profundidad de campo y un realismo tridimensional nunca antes visto en el dibujo plano.
- Personalidades Únicas: Fue la primera vez que se logró dotar a cada personaje —especialmente a los siete enanitos— de gestos, voces y psicologías individuales y reconocibles.
- Lenguaje Visual: La película sentó las bases narrativas que permitieron que la animación fuera tomada en serio como una forma de arte cinematográfico.
Hoy, a casi nueve décadas de su debut, la manzana mordida sigue siendo el símbolo de un inicio legendario que permitió que la fantasía se convirtiera en una de las industrias más poderosas del mundo.
EO// Con información recopilada de la web