La vigilia, que dio inicio formal a las 11:30 p.m., se caracterizó por un palpable sentido de unidad y un fervor religioso
Apure se congregó durante la noche del sábado y la madrugada del domingo por canonización-. En una demostración masiva de fe y devoción popular, la comunidad apureña se congregó espontáneamente durante la noche del sábado y la madrugada del domingo para participar en una emotiva y extensa vigilia, uniéndose así a la celebración universal por la canonización de los dos primeros santos de Venezuela: San José Gregorio Hernández y Santa Carmen Rendiles.
La ciudad capital, San Fernando de Apure, se vio literalmente iluminada por la fe de miles de feligreses que, portando velas e imágenes de los nuevos santos, llenaron los principales templos católicos de la localidad, incluyendo la Catedral, la Iglesia Nuestra Señora Del Valle y la Iglesia Cristo Rey, creando un mosaico humano de profundo recogimiento espiritual.
La vigilia, que dio inicio formal a las 11:30 p.m., se caracterizó por un palpable sentido de unidad y un fervor religioso que trascendió las generaciones, reuniendo a niños, jóvenes, adultos y ancianos en un mismo acto de comunión.
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El encuentro, mantenido con intensa devoción durante toda la madrugada, concluyó a las 6:00 a.m. de este domingo con una solemne Misa de Acción de Gracias que congregó a una multitud aún mayor, cerrando así un ciclo de oración ininterrumpida.
De esta manera, la feligresía apureña no solo marcó el inicio de un día trascendental para la historia religiosa de Venezuela, sino que también ofreció una poderosa demostración de su profunda fe católica y del inmenso orgullo que siente por el reconocimiento universal de la santidad nacida en su tierra, estableciendo un precedente de cómo las comunidades locales pueden apropiarse de manera vibrante y significativa de los hitos espirituales que definen la identidad nacional.
EO/// Con información de: Notiapure