Estos macarrones con chorizo y jamón son ideales para el día a día, son sencillos y rápidos de preparar y además no hay duda de que son sabrosos
Prepara unos deliciosos macarrones gratinados con chorizo-. Estos macarrones con choricito y jamón son ideales para el día a día, son sencillos y rápidos de preparar y además no hay duda de que son sabrosos y llenan de alegría cualquier mesa. Perfectos para una comida en familia, pero también para una cena informal con amigos si los sirves bien emplatados. Que no te extrañe si tus comensales terminan chupándose los dedos, el sabor intenso de este plato de pasta es sencillamente espectacular.
Esta receta es sencilla y barata, y usa ingredientes que todos tenemos por casa. Como diría mi abuela, “de esos que nunca faltan en la despensa”. Ingredientes muy sencillos, una receta sin pasos complicados y un resultado tan sabroso que a la fuerza te tiene que gustar.
Esta receta me recuerda tanto a la cocina de mi abuela que hasta puedo imaginar el olor desde el momento en que empiezo a picar los ajos. Los macarrones gratinados con chorizo y jamón son un clásico en mi casa, de esos que los niños, y no tan niños, esperan con ganas. Para los que piensan que la pasta es solo “al estilo italiano”, aquí va un plato que demuestra que con un toque español puede ser incluso mejor. Estos macarrones en mi casa siempre triunfan, y créeme, mis peques los devoran. Así que, ponte el delantal y prepárate para cocinar un plato de pasta cargado de sabor.
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Ingredientes
– 320 gramos de Macarrones
– Chorizo 50 gramos
– 50 gramos de Jamón Serrano
– 50 gramos de Queso rallado
– 600 gramos de Tomate Triturado
– 1 Cebolla
– Dientes De Ajo (2)
– Huevos (2)
– 2 cucharadas de Aceite De Oliva
– Orégano
– Pimienta
– Sal
Preparación:
1- Primero, la salsita; Empieza pelando y picando la cebolla y los ajos. En una sartén grande, calienta un poquito de aceite de oliva y dóralos. Luego, agrega el chorizo y el jamón y deja que suelten su sabor unos minutos. Ahora viene el tomate triturado; échalo a la sartén y añade sal, pimienta y orégano. Cocina a fuego lento unos 20 minutitos, removiendo de vez en cuando. Aquí ya el aroma debería empezar a ponerte los pelos de punta.
2- Cuece la pasta; Cuece los macarrones en agua con sal hasta que estén al dente (¡nada de dejarlos pasados!). Escúrrelos bien, y mezcla con la salsa para que queden impregnados de todo ese sabor. Un buen meneo y listo.
3- La magia del gratinado; Pon los macarrones en una fuente de horno, bate los huevos y viértelos encima para que al gratinar se forme una costra doradita. A 200º C, unos 5 minutos y… ¡tachán! Tienes un plato para chuparse los dedos.
EO// Información de: Cocina Fácil