Aceptar ayuda, nunca está de más, reconocer que necesitas una mano amiga, alguien que nos brinde ayuda, apoyo y comprensión
Nunca está de más reconocer que necesitamos ayuda. — En un mundo individualista donde cada vez se contemplan más las necesidades de supremacía, (presentes en instintos primitivos del ser humano) es común encontrarnos con personas negadas a aceptar una mano dispuesta a brindar apoyo. Pero la verdadera pregunta radica en ¿está mal recibir ayuda?
Porque el ser autosuficiente no es malo, pero reconocer cuando no puedes hacer algo por tu cuenta, tampoco lo es. Algunas cosas como la crianza y entorno de desarrollo, influencian fuertemente esto, desde niños se inculcan inclinaciones fundamentales que nos condicionan a ser independientes, pero no podemos dejar de lado que por nuestra misma naturaleza como humanos en entorno social “pedir ayuda”, “preguntar si tienes dudas” o “apoyarte en los demás” no es algo malo, o inaceptable.
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Dependemos de nuestros padres o representantes en nuestros primeros años de vida, pero a lo largo de nuestro caminar por el mundo, habrá mucho que desconocer y también nos encontraremos quienes estén dispuestos a enseñar, a educarnos, a sostenernos cuando sentimos que vamos a caer.
Incluso en los momentos de soledad, hay gente dispuesta a ser luz en medio de la oscuridad, serán un faro, para que puedas apoyarte si la situación que estás afrontando parece muy difícil, o desesperanzadora, no estás solo, eres importante, siempre hay quienes nos aprecian, de forma real.
“Debemos llamar a los amigos cuando nos pueden ayudar, y está bien acudir de buena voluntad a auxiliar a los que pasan adversidades” dijo Aristóteles, y es una gran verdad.
En conclusión, sostener la mano que te ofrecen no te resta facultades, muy por el contrario, demuestra la capacidad que, como ciudadanos tenemos, para vivir rodeados de personas extraordinarias que con disposición serán guías del camino que decidamos seguir.
EO // Redacción Bárbara León.